Albert Pike con su atuendo masónicoEn esta entrada relacionaremos el Ocultismo de ciertas Sociedades Secretas con el porvenir de la humanidad y su historia como la conocemos.
La historia de los hombres es movida por distintos hilos que permanecen ocultos tras un velo, al que sólo tienen acceso unos pocos iniciados, los cuales muy pocas veces se hacen conocidos a los ojos de los profanos. Uno de ellos es Albert Pike, un personaje no muy conocido para quienes se encuentran ajenos a las Cofradías de Misterios.
Pike es reconocido por haberse desempeñado durante 32 años como
Soberano Gran Comendador del rito escocés antiguo y aceptado de la franmasonería estadounidense, haber sido General de Ejército, habiendo participado en la guerra mexicano-estadounidense y en la Guerra de Secesión Americana por los Estados Confederados del sur, además, Pike fue el jefe de justicia del Ku Klux Klan.
Aprovechando la fecha, que coincide con el natalicio de Albert Pike, os dejaré una carta que, según William Guy Carr, está fechada el 15 de agosto de 1871 y se trataría de un escrito que Pike le envió a Giuseppe Mazzini, un frater italiano de la Orden Illuminati, quien se destacó por su activo rol en el proceso denominado Unificación Italiana.
La carta se relaciona con las Guerras Mundiales:
Fomentaremos tres guerras que implicarán al mundo entero. La primera de ellas permitiría derrocar el poder de los zares en Rusia y transformar ese país en la fortaleza del comunismo ateo necesaria como una oposición controlada y antítesis de la sociedad occidental. Las divergencias causadas por los "agenteur" (agentes) de los illuminati entre los imperios británico y alemán serán utilizados para provocar esta guerra, a la vez que la lucha entre el pangermanismo y el paneslavismo. Un mundo agotado tras la guerra, no interferirá en el proceso de construcción de la "nueva Rusia" y el establecimiento del comunismo, que será utilizado para destruir los demás gobiernos y debilitar a las religiones.
La segunda guerra mundial se desataría aprovechando las diferencias entre la facción ultraconservadora y los soinistas políticos. Se apoyará a los regímenes europeos para que terminen en dictaduras que se opongan a las democracias y provoquen una nueva convulsión mundial cuyo fruto más importante será el establecimiento de un Estado soberano de Israel en Palestina que venía siendo reclamado desde tiempos inmemoriales por las comunidades judías. Esta nueva guerra debe permitir consolidar una Internacional Comunista bastante fuerte para equipararse a la facción cristiana/occidental.
La tercera y definitiva guerra se desataría a partir de los enfrentamientos entre sionistas políticos y los dirigentes musulmanes. Este conflicto deberá orientarse de forma tal que el Islamcristianismo, cuyos espíritus deístas estarán a partir de ese momento sin rumbo y ansiosos por un ideal pero sin saber dónde hacer su adoración, recibirán la verdadera LUZ a través de la manifestación universal de la doctrina pura de "Lucifer", sacada a la vista pública finalmente. Esta manifestación resultará del movimiento reaccionario general que seguirá a la destrucción del cristianismo y ateísmo, ambos conquistados y exterminados al mismo tiempo.
William Guy Carr, Peones en el juego (1955)
Está de más señalar que los dos primeros párrafos se llevaron a cabo en la historia al pie de la letra, mientras que el tercero está a punto de llevarse a cabo; las relaciones en Oriente Medio están cada vez más tensas. Tampoco está de más señalar que la carta está fechada en el año 1871, es decir, cuando aún no ocurría ni la Primera Guerra Mundial, mucho menos la Segunda, ni se creaba el Estado de Israel en Palestina, ni había sido derrocado el Régimen Zarista en Rusia.
Esto no es una predicción ni una profecía, sino que una Agenda.
